viernes, 18 de enero de 2013

18.576 HORAS


  Fotografía: Clochard

18.576 HORAS

Hoy hace  18.576 horas que te vi por primera vez.
18.576 horas en que nos inscribimos en el curso de: “Como aprender a amar sin ver ni tocar, solo imaginar”
Curso a distancia  con unas pocas clases on line y algunas horas presenciales.
            Se impartía, sin solución de continuidad, en el prestigioso sanatorio “St. Jude Thaddeus” patrón de causas imposibles. No había horario ni calendario y la inscripción daba derecho a una  estancia sine die en habitación individual, con tratamiento y pensión completa incluidos, caso de que la mano del Santo no fuera suficiente para obtener los resultados deseados.

            Hoy he firmado mi boletín de ingreso. No se cuando podré salir. Las condiciones aceptadas al firmar, les permite hacer conmigo lo que quieran, incluso, en el caso de no superar el tratamiento está incluida la donación de mis órganos para la investigación, ya que para salvar almas son inservibles.
           
            No es culpa tuya y, probablemente, tampoco mía. Ninguno de los dos hemos tenido lo que hay que tener para navegar con timón firme por el mar de   las desdichas.
            Nuestras almas errantes se encontraron en un invierno frío en el que hasta las playas estaban nevadas. Nos dimos calor. El calor que necesitábamos sin saberlo. Sin buscarlo.
Fui torpe al principio. Nervios y emoción contenidas.
            Vi en ti, huella de dolor y sufrimientos pasados.
Vi en ti, luz de esperanza en tu mirada.
Vi en ti,  amor luchando por vencer tus reticencias
Y  me prometí a mi mismo que haría lo imposible por hacerte feliz, por que tu felicidad, traería la mía
Promesa que no he sabido cumplir.
Por eso te pido perdón con el corazón roto, por que se que tu también lo tienes


Cuando escribo esto hace 18.576 horas que conocí la felicidad y tres que la he perdido.


Relato de ficción basado en hechos reales

Clochard 



10 comentarios:

  1. Os pido disculpas por mi ausencia.
    Hoy no puedo devolveros las visitas.
    Mañana intentaré hacerlo
    Gracias por estar y un abrazo
    Clochard

    ResponderEliminar
  2. En el instante en el que el corazón se rompe, de alguna forma u otra sentimos morir algo muy dentro de nosotros, lograr expresarlo de la manera en que tú lo has hecho es sencillamente hermoso, sí, ya sé que un dolor no lo es, pero sí que puede serlo según como lo expresas y tú, pues para mi gusto lo has conseguido.

    A veces no sabemos cumplir aquello que tanto deseábamos lograr y tan sólo el perdón puede sacarnos ese sentimiento tan nefasto.

    Besos y disfruta del finde!!! Más allá de esas paredes que limitan con el mundo de los vivos hallaremos un nuevo camino, una sonrisa o una mirada que nos hará sentir que todavía estamos vivos....

    ResponderEliminar
  3. ánimo, querido amigo.

    Qué ironía, te doy ánimos cuando los míos están por los suelos. Me temo que compartimos el mismo sanatorio¡

    Mira al futuro con optimismo, es el único fármaco para salir.


    Besos¡¡¡

    ResponderEliminar
  4. Porque nada es eterno en esta vida, y todo termina, porque la vida no permanece quieta sino que todo cambia, igual los sentimientos.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  5. Lamentablemente nada hay eterno, buscamos un camino y terminamos en otro distinto, el dolor que deja una ruptura, más cuando sentimos que había más por ofrecer o recibir es difícil, siempre hay un porque, las diferentes siuaciones cambian, la vida sigue.

    Te diré que el sanatorio “St. Jude Thaddeus” tiene un excelente programa de recuperación llamado, "Tiempo al Tiempo", será excelente la dósis administrada, sus efectos son a paso lento, pero seguros.

    Besos Clochard

    ResponderEliminar
  6. muy duro, pero increiblemente profundo y capaz de hacerte sentir lo que expresas me encanta

    ResponderEliminar
  7. San Judas Tadeo, es el santo de los imposibles.
    Si piensas que está todo perdido, intenta pasar página, puede que te cueste, pero esto segura que saldrás recuperado, nadie se ha muerto de amor.

    Un abrazo



    ResponderEliminar
  8. Qué bonito, clochard! y al final pidiendo perdon por no conseguir tu propósito.
    Muy noble y romántico.
    Besos.

    ResponderEliminar
  9. El desamor y la desilusión siempre vienen envueltos en un manto de ausencia y dolor.Un hermoso y emotivo texto.Un cálido abrazo.

    ResponderEliminar
  10. Ese curso está muy solicitado.
    Creo que casi todo el mundo se ha inscrito alguna vez.

    Saludos.

    ResponderEliminar

Puedes decir tu opinión, sea cual sea, pero respeta la de los demás.

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.