Fotografía: Fedrik Odman
Ojala pudieras oír
Este grito vacío
Destrozaría tus tímpanos
Lleno de odio, desprecio y desvarío
Ojala llegues a sentir
Este dolor vivido
Que atenaza, ahoga, envenena
No eres hiena ni serpiente
Demasiada nobleza para ti
Confórmate con ser apenas
Algo indefinido y pestilente
Pensaste en ti y solo en ti
Blandiendo espada de un nosotros
Clavaste y sigues hurgando
Buscando inútil sangría
Pues no se mata a quien murió
En esa, tu historia vacía
Madre de mis hijos eres
Más no mereces tan noble nombre
No los quisiste separar
De esta guerra singular
Madre es la que quiere,
Madre es la que educa
Y además se preocupa
De no hacer olvidar
A sus hijos confundidos
Que su padre tuvo que ver
En el milagro de nacer
Que los quiere más que a su vida
A pesar de su partida
Que nada tiene que ver
La historia de dolor
Evitando una
muerte en vida
Con lo sentido hacia ellos
Que tan solo es amor
Clochard
El titulo podría ser desamor de madre
ResponderEliminarImrpesionante poema
Clochard, me gusta mucho la imagen que has puesto en el encabezamiento.
ResponderEliminarEn cuanto al poema, se siente dolor al leerlo, tus letras se envuelven en gritos ahogados, de rabia y de dolor, profundas emociones albergan el los versos de tu poema.
Un beso.
Clochard, te podría decir muchas cosas, tantas que a las yemas de mis dedos le saldrían ampollas. Tu dolor lo comprendo, su actitud la deploro. Y como en tantas y tantas historias son los hijos los que al final pagan el pato de una manera u otra. Las actitudes ante la vida pasan factura- Tu estás la ya estás pagando, la parte contraria la pagará tarde o temprano.
ResponderEliminarPor desgracia una separación no es una película americana, donde todos se llevan de puta madre ¿a que no?, por desgracia la realidad es cruda y cruel.
Un abrazo enorme
Hola amigo Clochard, al fin me toca llegar a tu casa, y por cierto me encuentro un poema doloroso que parte el alma, por ese grito de dolor y angustia, de un padre herido por el amor inmenso a sus hijos.
ResponderEliminarEste es un tema delicado, y hay personas que se toman las cosas como si hubiese un manual, pero tocaste los puntos clave que hay que tener en cuenta y que no se pueden dejar pasar. Eres padre, y yo no entiendo la situación, pero sé que lo más importante no cabe la menor duda, es que el cariño del padre es tan importante como el de la madre para el buen desarrollo psíquico del niño, y esto es lo importante. Por supuesto, madre es la que ama a sus hijos y los separa de las guerras entre la pareja.
Un abrazo grande y ...ánimo Clochard.
Hay formas de mostrar dolor y al tiempo rabia, tal vez no sea la palabra exacta lo que digo, pero cuando hay situaciones que sin injustas y en las cuales pagan terceros (hijos) uno se rebela ante ello y precisa soltarlo, dejarlo ir, y ojalá fuese fácil echar todo ello fuera y liberarse, pero no sucede siempre así. Tomo como inspiración tu poema, y lo hago porque es duro y refleja unas realidades en las que a menudo se culpa directamente al hombre cuando puede ser que precisamente quien menos en razón entra sea la mujer, y verlo así en un excelente poema, me gusta porque en general se suele poner como ejemplo lo contrario. Pero lo más importante cuando hay algo así, no es ni el uno ni el otro sino "los hijos"
ResponderEliminarBesos!
Hola Clochard
ResponderEliminarOtra vez paso por aquí. Sé que no es el mejor momento ni el mejor post para decirte que pronto te enviaré un cariño ( es decir un premio), espero que lo aceptes de buen grado
Un abrazo
Transmites el dolor de tu alma en el poema, creo Clochard que los hijos nada de culpa llevan de los errores de los padres, siempre ante una situación de ruptura, ellos deberían quedar fuera, libre de las batallas y puestos entre nubes azucaradas, son niños, son fruto de un amor, pasado o presente, no importa, son parte nuestra y en ellos debemos centrarnos
ResponderEliminarBesos Clochard